Estos últimos meses os hemos recomendado diferentes dentistas dependiendo de la especialidad que pudierais necesitar para vuestros hijos, desde ortodoncia, hasta tratamientos para las caries o incluso periodoncias infantiles. Y es que, aunque hay muchísimos dentistas que son grandes profesionales, para tratar con niños no sólo hay que ser bueno, sino tener también una gracia, un don para ser paciente con ellos y conseguir calmarlos. Hoy, tras ver su trabajo, os traemos a los profesionales de la Clínica Dental Caballero de Rodas, concretamente a su jovencísima odontóloga Paola Laguarda a quien conocí hace poco y tiene ese don con los niños del que hablábamos, esa gracia para tratarlos.
La realidad es que los niños, por norma general, tienen terror a ir al dentista. Si los adultos ya de por sí tenemos cierto respeto, y algunos miedo, imaginad lo que pueden llegar a sentir los pequeños de la casa cuando entran a la consulta de un dentista y tienen que abrir la boda de par en par para que les claven una aguja gigante de anestesia que, además de dar un miedo horroroso, produce un dolor, momentáneo, pero intenso.
Por eso es tan importante que el profesional que va a tratar al niño o la niña sepa cómo ha de manejarlo. Normalmente calmarlo e intentar explicarle lo que les van a hacer antes de iniciar el trabajo suele funcionar, eso sí, que no se les ocurra enseñarles los instrumentos o se morirán de miedo antes de que el pobre dentista meta la mano en la boda del crío.
Pues bien, esta profesional de la que hablo, tiene una paciencia infinita con los niños. Antes de empezar a trabajar con mi sobrina estuvo hablando con ella, calmándola, gastándole bromas, intentando que se relajara. Luego le explicó lo que le iba a hacer y el motivo por el que no le iba a hacer daño y llego un punto en el que con solo preguntarle a la pequeña “¿Confías en mí?” pudo empezar a trabajar sin que la niña moviera un solo pelo de su larga melena.
Cuestión de tiempo
Está claro que muchas veces el tiempo apremia, sobre todo cuando tienes a gente esperando su turno en la sala de espera, y por eso es lógico que los dentistas no puedan dedicar tanto tiempo como les gustaría a cada paciente pero, en mi opinión, pienso que cuando se trata de un niño, la clínica ha de tenerlo en cuenta y dar más margen de horario hasta el siguiente paciente y eso la Clínica Dental Caballero de Rodas lo cumple al 100%, lo cual me parece un auténtico acierto.
En la edición digital de la revista Hola, ofrecen seis consejos para superar el miedo al dentista algunos de los cuales me parecen realmente buenos, como convertir la visita al dentista en un hábito, sobre todo entre los niños pequeños, para que lo vean algo rutinario que han de hacer y no como un sitio al que se va cada cierto tiempo y en el que te hacen daño. También aconsejan que evitemos expresiones como “no te van a hacer daño” o “no tengas miedo”, es mejor hablar positivamente, huyendo del “no”. Podemos decir en su lugar, “va a ser muy rápido” o “te van a hacer cosquillas en lugar de daño”, por ejemplo. Echadle un ojo al artículo porque no está nada mal.
Sea como sea intenta conocer antes al doctor, saber cómo trabaja es un plus para ayudar a tu hijo o hija a superar el miedo al dentista.