Someterse a un tratamiento de ortodoncia no es para nada fácil, ni siquiera para un adulto: el dolor que puede causar cada vez que se hace un ajuste, no poder comer ciertos elementos, aplicar los cuidados necesarios, entre otras cosas.
Ahora, imagínate como puede ser para un niño pequeño el proceso de adaptación a estos nuevos, pero necesarios, elementos en su boca para corregir algún problema dental o de estética. Como sabemos que es difícil, hicimos una visita a los especialistas de odontología infantil de Policlínica Dental Tomares, en donde nos dieron excelentes consejos para ayudar a los más pequeños a adaptarse de la mejor forma posible a la ortodoncia.
Consejos para ayudar a tu hijo a adaptarse a la ortodoncia
Una de las situaciones más difíciles, durante este proceso es adaptarse a las comidas que pueden ingerir, durante el proceso puedes siempre darle lo siguiente:
- Si estaba acostumbrado a tener snacks dulces, se los puedes sustituir por alimentos más saludables, pero igual dulces y deliciosos como lo son las gelatinas, natillas, helados cremosos que no contengan elementos como chips o azúcar que puedan lastimarlos, o flan, galletas y bizcochos con texturas suaves.
- En cuanto a las comidas como el niño está en su etapa de crecimiento, no puedes limitarlo de comer nada. Sin embargo, lo que puedes hacer es darle alimentos de consistencia suave como pollo, pure de papa, carne magra, entre otros que sean fáciles de masticar.
- Incluye en su dieta jugos e incluso frutas, preferiblemente cortada en trozos, porque, por ejemplo, si es una manzana, al morderla podría causarle dolor e incluso dañar el aparato de ortodoncia.
Además de la comida, existe otra parte bastante difícil de adaptación a la ortodoncia que es el que dirán. Existen niños que de alguna u otra forma se van a burlar por cómo se ven. Sin embargo, en esta situación la mejor forma de ayudarlo es hablándole sobre porque es necesario que se tenga que someter a ese tratamiento y que si llega a suceder eso de que los niños se burlen, hable con la maestra y le explique lo que está sucediendo.
Por otra parte, la higiene dental es otro proceso en el cual debes ayudarlo a adaptarse, sobre todo si es un niño pequeño de seis años en adelante, aunque a esta edad ya pueden entender el porqué de algunas circunstancias. Tener que seguir la rutina de cepillarse a cada momento, tener que hacer uso de los cepillos interdentales, el hilo dental y asistir a la consulta con el especialista con más frecuencia, puede resultar un tanto agotador, para este caso, lo mejor es que le expliques porque debe hacerlo, hablarle sobre cuánto tiempo va a durar eso, lo que va a pasar una vez se termine y que cuando sea grande tendrá una sonrisa perfecta.
Si solo hablando, no encuentras resultados, puedes intentar con caricaturas o con tu ejemplo propio, simplemente haciendo lo que debe hacer para mantener el tratamiento, es decir, cada vez que deba cepillarse o usar el hilo dental, hazlo con él, recuerda que en cierto modo tu eres su súper héroe y modelo a seguir, además aprender con el ejemplo es más sencillo para ellos.
Ayudar a tu niño en este proceso, va a permitirle en cierto modo aprender sobre disciplina, así como también podrá aprender de autoestima. Al principio, como todo proceso, podrá resultar complicado de completar o adaptarse, pero no es algo imposible, simplemente hay que tener paciencia, educar con el ejemplo, estar ahí y apoyarlo de todas las maneras posibles, siempre teniendo presente el explicarles el porque es necesario que lleven ortodoncia a tan temprana edad.
¿Por qué se aplica ortodoncia infantil?
Porque de este modo se corrigen a tiempo problemas que en un futuro pueden llegar a ser mayores, por ejemplo, uno de los casos más comunes en los que se aplica la ortodoncia en infantes es para corregir problemas relacionados con la mordida o la posición de algunas piezas dentales. De este modo, se van asegurar de que el niño pueda morder con facilidad al igual que masticar y que por supuesto tenga una sonrisa bonita.
Además, la ortodoncia también contribuye a la prevención de las caries, al tener más higiene y cuidado, es menos probables que esta enfermedad aparezca. Asimismo, contribuyen a que los futuros tratamientos sean más rentables. Sirven para fortalecer la autoestima de los pequeños, así como hacerlos disciplinados comprendiendo la importancia de los mismos.
Y lo más importante, cuando sean grandes lucirán una gran sonrisa blanca y perfecta sin tener que volver a someterse nuevamente a un tratamiento de ortodoncia. Así que, si tu hijo tiene ortodoncia, ya sabes cómo puedes hacer más sencillo su proceso de adaptación.